jueves, 21 de agosto de 2008

Descartes y los límites del sujeto

Vivimos llenos de respuestas a preguntas que nunca nos hemos hecho
Julio Olalla


Jonnhy tomó su fusil es posiblemente uno de los títulos clásicos más controvertidos, No tanto por su discutible calidad cinematográfica, como por la potencia de su discurso.
El ser humano reducido a la pura conciencia, aislado del mundo, un "Gregor Samsa" con fusil cuya vida da un giro radical en el momento que de él sólo queda la mente.

Es la historia de un joven norteamericano que se alista al ejército en la 1º Guerra Mundial. Dejando atrás novia y familia acude a la llamada del deber convencido de hacer lo correcto. Toda su vitalidad e inocencia desaparecerán en la explosión de una bomba, que le privará de brazos, piernas, boca, ojos y oído.
Cierto es que la situación que plantea es totalmente límite, un estado cartesiano donde la única verdad viene del pensamiento, y la realidad y la ensoñación son dos estados indiferenciables. Mediante flashbacks veremos su vida pasada, y también parte de sus sueños y recuerdos. A través de ellos vemos la crítica política y el ataque directo al discurso religioso que prima lo espiritual sobre lo corporal.
Un sólo un hombre en una camilla genera una serie de argumentos que muchos otros films con mucha más fanfarria no consiguen.
El dato: Se convirtió en film de culto cuando Metallica baso su videclip y canción One dicho film.
Algunos interrogantes que nos propone esa película:

¿Yo soy mi cuerpo?

Si perdieras un brazo, ¿seguirías siendo vos? Si te transplantaran el corazón, ¿Seguirías siendo vos? Tu cuerpo ya no es como el de tu infancia. Cada átomo de él, ha cambiado. ¿Seguís siendo vos?

¿Yo soy mi mente?
Si sufrís amnesia, seguís siendo vos, ¿o no?
Si te hubieran adoptado y criado otras personas, no pensarías igual, pero seguirías siendo vos. ¿O no?

Entonces…, ¿Qué somos? ¿Somos lo que los demás creen que somos, u otra cosa diferente? ¿Somos lo que hacen de nosotros o lo que nosotros mismos hacemos con nuestro yo? ¿Somos lo que nos pasa? En definitiva, ¿Qué delimita nuestra propia identidad?


2 comentarios:

Libélula dijo...

Definitivamente somos lo que nosotros hacemos de nosotros, no somos nuestro cuerpo ni nuestra mente, nuestro ser es mucho más intangible e inmortal.
Lo que nos pasa, nos pasa por que lo decretamos así, concientes o inconcientemente.
Armamos nuestra propio rol de la "pelicula" que es la vida.
Todo es maya (o maia) no se si se escribe así,todo es sólo la ilusión de lo que hemos creado en nuesra mente.lislibelula

Abel Vera Hidalgo dijo...

Gracias Libélula! siiii
Como será nuestro ser? no somos nuestro cuerpo entonces? ni nuestra mente? que somos? Descartes que diría? y desde la mirada Zen ¿Como seríamos?
Me interesa esa palabra que usas: "decretamos".... estudiaste metafísica?